EL CÓDIGO DA VINCI: UNA PERSPECTIVA DE LAS PERSPECTIVAS

QUIERO APROVECHAR LA OPORTUNIDAD DEL CUMPLEÑOS DEL PERIODICO, PARA HACER MI APORTE A ESTE MEDIO INFORMATIVO, ES NECESARIO PARA SER MEJORES CADA DÍA EVOLUCIONAR, POR LO QUE PROPONGO NUEVOS TEMAS QUE DE SEGURO SERAN MUY FRUCTIFEROS EN EL PROCESO DE FORMACION DE OPINIÓN.

La creatividad del ser humano es un arma contundente y poderosa, alcanza niveles tan sorprendentes que permite armar una realidad y a la vez desbaratar otra con puras suposiciones e invenciones, maquinadas con aspectos veraces que le dan aire de credibilidad; por ello en nuestro mundo puede que NADA SEA LO QUE PARECE.

En el Código Da Vinci, Dan Brown nos cuenta la “verdad”, o al menos lo que es para él la realidad, una historia que desmiente siglos de enseñanzas acerca de Jesús, la Iglesia y la Biblia. Plantea una interpretación donde mezcla datos y lugares reales con personajes y hechos, que a ciencia cierta no son más que ficción.

Entonces, ¿porque ha habido tanta controversia y la iglesia se ha puesto a la defensiva? no hay razón para preocuparse, este libro no es más que el despliegue de esa magnifica característica que poseemos los seres humanos, de la que hable al principio y que Dan Brown conoce muy bien: LA CREATIVIDAD

Es un excelente libro que nos demuestra cuan diversos somos, como podemos mirar todo desde diferentes perspectivas y como debemos ser capaces de defender nuestras ideas por encima de las demás, sin ser conformistas en un mundo en donde todo no lo enseñan y no nos dejan construir conocimientos propios.

No es nada personal, solo es en sentido figurado cuando en el código Da vinci se toma el tema de la iglesia, es solo un ejemplo; el ejemplo que decide citar Brown para mostrarnos como se puede jugar con los propósitos y con las creencias.

Sin embargo existe la posibilidad que Brown no este tan perdido, porque el hecho que Leonardo Da Vinci halla puesto en sus obras estos componentes de doble sentido puede que no sea solo coincidencia….

Entonces, ¿esta visión de Brown será una nueva versión de “cuando la ficción supera la realidad” o “cuando la ficción juega a ser realidad sin superarla”?

¿Quién miente? Juzguen ustedes mismos


MARCELA DEL PILAR RODRÍGUEZ CUELLAR
2006